“No vendemos solo pizzas y empanadas, vendemos una experiencia basada en la conexión y cercanía con el cliente”, dice el Brand Manager.

Cuando Matías Teper asumió como Gerente Comercial de Tomasso, la marca enfrentaba un momento de redefinición. Con un fuerte espíritu emprendedor, Teper venía de liderar sus propios proyectos y, en marzo de 2023, decidió dar un salto: sumarse por primera vez a una empresa como ejecutivo. Lo hizo a través de una consultora, fue promovido rápidamente a gerente de Operaciones y hoy es uno de los grandes impulsores del nuevo rumbo comercial de la cadena.

“Lo primero que entendimos fue que estábamos en una estrategia equivocada. Tomasso había quedado en el medio entre el modelo low cost y el segmento medio, lo cual nos perjudicaba. Mi propuesta fue volver al ADN original y potenciarlo: ser referentes en el segmento económico, pero sin resignar calidad ni experiencia”, explica Teper. 

La nueva visión implicaba más que ajustes de precios. Requería una transformación profunda, cultural y operativa. “Había que demostrar que se puede ofrecer un producto de calidad, sin escatimar en materia prima, a un precio accesible. Y, además, brindar una experiencia superadora: rica, buena, barata y rápida”.

Uno de los ejes clave del cambio fue el modelo de franquicia, donde Teper puso el foco en construir relaciones de largo plazo con los franquiciados y fortalecer el acompañamiento operativo. “Reforzamos la relación con los franquiciados a través de una comunicación constante y transparente. El objetivo era que cada franquiciado se sienta parte real del crecimiento de la marca”, comenta.

La reconversión no fue instantánea. Requirió análisis de datos, validaciones y una prueba piloto en cinco locales, donde los resultados demostraron la efectividad del nuevo modelo. A partir de ahí, se consolidó una visión común entre las áreas comerciales y de operaciones.

En septiembre de 2024, Tomasso bajó el precio de las empanadas y en marzo de 2025 lanzó la pizza de muzzarella más económica del mercado. Pero estos movimientos vinieron acompañados de una estrategia de comunicación fuerte, con presencia en vía pública, medios tradicionales y un mensaje directo: volver a competir en serio.

Para Matías Teper, uno de los mayores desafíos fue liderar en un contexto que no era propio. “Tuve que adaptarme a trabajar dentro de una estructura con cuatro socios, entender una cultura ajena, y, al mismo tiempo, generar una sinergia genuina con más de 60 franquiciados”.

Una de sus decisiones más estratégicas fue involucrarse directamente en la operación de los locales propios. “Solo así podía entender los desafíos reales. No quería ser un gerente de oficina; necesitaba vivir la experiencia Tomasso desde adentro, como si fuera franquiciado”.

Modelo de negocio probado, escalable y humano

Actualmente, la marca cuenta con más de 70 puntos de venta en Argentina y 11 en Uruguay. El objetivo para fin de 2025 es llegar a los 100, con foco en la expansión hacia plazas estratégicas como Neuquén, Mendoza, Córdoba, Santa Fe y la zona sur del Gran Buenos Aires.

Tomasso trabaja junto a la consultora “Canudas, profesionales en franquicias” para ofrecer a sus franquiciados un sistema sólido, con know how operativo y herramientas de marketing y comunicación pensadas para escalar.

“Probamos todo en locales propios y franquiciados de confianza antes de escalarlo. Eso nos dio margen de error y aumenta las chances de éxito. La clave es minimizar riesgos sin frenar la innovación”, explica el Brand Manager.

Pero más allá de las cifras y las estrategias, Matías Teper tiene claro qué es lo que diferencia a Tomasso: su cultura cercana y su visión a largo plazo. “Mi esencia está en cada decisión que tomamos: obsesión por los detalles, foco en la experiencia del cliente y convicción de que una marca tiene que emocionar. No se trata solo de vender pizzas. Se trata de contar una historia y esta historia la estamos construyendo entre todos”, concluye.

por Karina Longo

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